Entrevista a Nicolás Maragliano ganador de NetRiders Latam 2009

lunes, 5 de abril de 2010


Contanos un poco cuándo comenzó tu pasión por la tecnología.
A los 13 empecé a estudiar computación por correspondencia. Todavía era muy pobre la realidad tecnológica argentina en aquella época.

Cuál fue el sueño que no pudiste cumplir en tus estudios y cómo llegaste a la Academia de Cisco.
Quería ir a la universidad pero no tenía dinero, mi sueño era ser Lic. en Física. La realidad es que trabajé de mecánico mientras pude y luego mi hobby, las computadoras, me dieron la posibilidad de subsistir cuando me quedé sin trabajo (de 2001 al 2007). Allí descubrí a través de un anuncio que me trajo mi esposa la existencia de la Academia y los cursos CCNA. Me inscribí inmediatamente y luego de empezar las clases, supe que eso era lo que me estaba faltando; el conocimiento de las redes.



Cómo llegaste a NetRiders y por qué te inscribiste.
En el 2009 estaba terminando mi 4to curso de CCNA y sabía que tenía chances de ir a NetRiders a hacer un buen papel. Pero mi principal aspiración era estar entre los mejores 50 de la región. Sabía que ese ranking se publicaba en el web site de Cisco y que era sumamente apreciado por las empresas que están buscando nuevos talentos.

Lo que jamás imaginé es que no solo ganaría el primer lugar en la Argentina sino en toda Latinoamérica. Más allá de los premios y el viaje, este concurso me dio confianza, saber que puedo ir por el número 1 y no solo conformarme con estar entre los primeros 50.

Contanos un poco cómo fue el viaje a la sede de Cisco en San José, California...
Había un grupo de 15 personas, todos los ganadores a nivel mundial. Sólo había una mujer (la ganadora de Malta) que estaba en el grupo. Fue algo increíble.

Por último, el viaje también te ha permitido descubrirte como un instructor.
Sí, me permitió saber que puedo ayudar a mis compañeros de clase y transmitir con claridad los conceptos que a veces pueden ser complejos de comprender.

1 comentarios:

  • Unknown

    Felicitaciones Nicolás!

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